De entre la gran cantidad que tenemos hoy en el mercado smartwatch, Samsung apostó por un dispositivo diferente. El Samsung Gear S es un dispositivo que se diferencia por la capacidad de poder ejecutarse sin necesidad de tener que llevar un smartphone, y esto es algo que para muchas actividades sobre todo deportivas se hace muy cómodo.
La capacidad de ser un dispositivo totalmente independiente choca mucho con un diseño pensado para ser elegante, un diseño que también convierten al dispositivo en uno de los más grandes en toda la esfera smartwatch a día de hoy. Estamos por tanto ante una contradicción para un dispositivo que con otro diseño podría ser una apuesta acertada para realizar actividades de tiempo libre.
Diseño Samsung Gear S
El diseño del dispositivo es algo que puede generar tantos defensores como detractores al Samsung Gear S. Um dispositivo muy bonito que recuerda bastante a la Samsung Gear Fit, pero que sin embargo y sobre todo debido a su gran tamaño hará que muchos usuarios se echen atrás. Sobre todo pensé que para mujeres, es un dispositivo demasiado grande pero también he de reconocer que la reciente presentación en la Mercedes Madrid Fashion Week, cambió un poco mi opinión al respecto.
Una pantalla de 2 pulgadas que hace que veamos con claridad lo que estemos ejecutando en ese momento, hace que el dispositivo tenga unas dimensiones generosas de 58,1 x 39,9 x 12,5 mm, para que comprobéis de que dimensiones hablamos vamos a compararlo con cualquier otro por ejemplo el LG G Watch que terminamos de probar hace unas semanas, este dispositivo tiene unas dimensiones de 46.5 x 37.9 x 9.95 mm. Si observáis hablamos de un dispositivo más grande en toda su dimensión, y el G Watch por su tosco diseño no es precisamente de los más pequeños en nuestra muñeca.
Sin embargo y dejando aparte las dimensiones el dispositivo tiene un diseño que enamora a simple vista, es llamativo y cualquier persona que pase por vuestro lado si tiene ocasión de mirarlo os preguntará que reloj es, me ha ocurrido en bastantes ocasiones, por lo que estoy seguro de que estamos ante uno de los smartwatch con mejor diseño de todo el mercado.
Samsung ha incorporado su famoso botón frontal en la pantalla, algo que es de valorar y que como en el Motorola Moto 360 es un punto que hace el uso del smartwatch sea más cómodo, aunque sinceramente lo es más en el caso del dispositivo de Motorola que lo incorpora en el lateral. La entrada para la tarjeta SIM se encuentra en la parte trasera y lo mismo ocurre como es lógico con el medidor de ritmo cardíaco.
Lo que no es nada cómodo y hace que los dispositivos wearables de Samsung sean demasiado especiales en este aspecto es el sistema de carga que incorpora. Como en otros que hemos tenido posibilidad de probar utiliza un soporte que se agarra al dispositivo con una pestaña, nada intuitivo ni fácil de hacer en algunas ocasiones, y que hace que cada noche por la autonomía que nos deja el dispositivo, tengamos está tediosa tarea que realizar.
Batería Samsung Gear S
Lamentablemente es lo mismo de siempre ya que no existe un dispositivo que nos sorprenda últimamente en este apartado, y da igual que sea de una plataforma u otra, en este caso Tizen tiene los mismos problemas que Android Wear y es una autonomía que difícilmente lograremos alargar más allá de dos días cuando tengamos que usarlo con asiduidad, por no decir cuando en lugar de parearlo lo tenemos con tarjeta SIM, que en ocasiones se nos va a solo 5 o 6 horas de uso.
El smartwatch no tiene una autonomía suficiente, lo realmente raro es que el dispositivo tiene una batería con 300 mAh y digo raro porque estamos ante el smartwatch más grande del mercado, o uno de los más grandes. Samsung debería haber incluido una capacidad más grande que permitiera alargar la autonomía. Seguramente sea por problemas de espacio ya que en la muñeca llevamos un smartwatch prácticamente completo.
En uso pareado en días en los que no tengamos mucho nivel de notificaciones el dispositivo aguanta bien 2 días de uso, sin embargo en el momento que tenemos un día de estos en los que los planetas se alinean y simultáneamente los grupos de Whatsapp empiezan a generar spam como si no hubiera un mañana, la batería sufre bastante, esto hace que lleguemos muy justos a la noche.
La carga de la batería es rápida pero sin embargo tenemos que volver a criticar el sistema de carga, no es cómodo y por lo tanto es un punto a mejorar por parte de Samsung. Como decimos es rápida ya que en 30 minutos hemos conseguido tener al smartphone al 100%.
Software Samsung Gear S
Tizen fue pionero en el mercado smartwatch un sistema operativo maduro que permite a Samsung personalizar su capa como quiera, con funcionalidades muy por delante de las que encontramos en Android Wear y que convierten al dispositivo en único en su especie.
El poder irnos a correr un rato sin tener que llevar el smartphone es una de las mejores bazas del dispositivo, estamos conectados a nuestras redes sociales, podemos recibir llamadas o incluso responder a correos gracias al teclado en pantalla que incorpora. Puede parecer que no es cómodo escribir en un teclado tan pequeño, pero es cuestión de acostumbrarse, en el momento que lo hacemos un par de veces la velocidad de escritura aumenta considerablemente.
Otro apartado a valorar es el poder llevarnos el dispositivo sin smartphone y poder tener una conectividad completa GPS, a la hora de hacer rutas o salir con bici es algo muy cómodo. Y que nos permite ir con menos dispositivos encima.
Si nos vamos al apartado de música tenemos un dispositivo completo para la reproducción. Sus 4 GB de almacenamiento nos permite que podamos llevar mucha música encima, la conexión Bluetooth permite conectar unos auriculares de este tipo y disfrutar de una experiencia sin cables.
En líneas generales es un software maduro que no deja dudas de que estamos ante algo bien hecho aunque puede mejorar cosas que nos permitan hacer un uso más intuitivo del dispositivo. Seré muy torpre pero en el panel de notificaciones me cuesta mucho encontrar opciones como borrar todo al principio, esto no es un impedimento es solo que tenemos que sumar a mi torpeza un poco más de experiencia.
Conclusiones Samsung Gear S
El dispositivo se encuentra entre nuestra lista de deseos no os lo voy a negar, sin embargo aspectos como la carga de la batería y la autonomía del mismo hacen que ya no lo tengamos tan claro. La pantalla es una maravilla como casi todas las que hace Samsung y que vuelve a recordarnos a nuestro smartwatch platónico el Gear Fit.
Lo que más te va a echar hacia tras a la hora de comprarlo es su precio, aunque ya podemos encontrarlo por poco más de 250 euros, el smartwatch tiene el precio en la mayoría de tiendas en 299, bien vale pagarlos por lo que aporta más que el Motorola Moto 360, sin embargo hace que nos lo pensemos más de la cuenta si lo comparamos con la Gear Fit, o LG G Watch aunque sacrifiquemos características por ahorrarnos 150 euros.
